Una de las mejores novelas geek que hay. Punto. Tiene de todo, tecnología, segunda guerra mundial, oro, espionaje, batallas, criptoanálisis, negocios, amor y bastantes temas geeks.
Debo reconocer que fue la primera novela que leí de Neal Stepheson y como cualquier novato en la literatura de Stephenson fue un poco complejo entender su manera de describir las cosas, pero conforme la novela se va desarrollando y tu gusto se familiariza con la redacción de Stephenson, tu lectura se va haciendo mucho más fluida.
Después de casi 20 años de publicado Cryptonomicon (se publicó en 1999), al fin tuve la suerte de encontrarme con ella y leerla. Para ser sincero, las recomendaciones no venían de muchas personas, pero hubo una persona a la que por fin presté atención y ahora agradezco por haberlo hecho.
Aun cuando la novela se aproxima ya a sus 20 años de publicación es sorprende que en el relato no se note casi la edad. En especial al tratarse de una novela geek en la que se narran y describen tecnologías utilizadas a finales de los años 90’s y que siguen sonando bastante actuales.
La novela se caracteriza por contar con dos líneas principales de tiempo. La primera de ellas es de los años 40’s y se desarrolla antes y durante la Segunda Guerra Mundial, con Lawrence Waterhouse como uno de los principales personajes de la novela. Siendo este un matemático apasionado del criptoanálisis, forma parte de un equipo de élite que combate desde la trinchera de la criptografía a los nazis, junto con personajes históricos como el magnífico Alan Turing.
La segunda línea de tiempo se desarrolla en el “presente”, es decir, a finales de los 90’s, con la presentación del bisnieto de Lawrence Waterhouse: Randy Waterhouse. Randy es un geek en toda la extensión de la palabra. Es un apasionado de los juegos de rol, fanático de los sistemas UNIX y con un gran interés en la seguridad informática, así como en los nuevos negocios digitales, como las criptomonedas. Junto a sus socios y amigos, Randy inicia la aventura de abrir un negocio de telecomunicaciones en Filipinas, pero lo que ahí encuentran, les lleva a una mega aventura de criptografía, secretos, espionaje y oro, mucho oro.
Es una novela bastante larga, con más de 800 páginas, pero sin duda es una de las mejores novelas geek. La longitud de la novela no se percibe, ya que la trama se vuelve cada vez más trepidante y el salto entre las líneas de tiempo, aun cuando al principio se siente extraño, finalmente acaba por dar a la historia una gran profundidad y ambas líneas de tiempo se terminan complementando.
Por otro lado, Stephenson realmente hizo una gran labor de investigación e involucra en la novela tremenda cantidad de referencias geek y elementos técnicos, como por ejemplo retrata con lujo de detalle mecanismos de criptografía, incluye scripts de Perl, explica comandos en UNIX y tecnologías de espionaje. Incluso se adjunta al final de la novela, un tutorial para encriptar tus propios mensajes con la ayuda de un mazo de cartas.
La versión que leí es la traducción al español de España. El traductor hizo una buena labor al traducir el original, sin embargo, hay términos que solo se utilizan en España y al leerlos en latinoamérica suenan extraños e incluso pueden distraer de la idea principal. Recomiendo en la medida de lo posible, adquirir la versión original en inglés, ya que hay términos o acrónimos que solo funcionan en el inglés y al traducirlos se pierde el sentido.
Cryptonomicon tuvo tal éxito en su lanzamiento, que Neal Stephenson escribió varias precuelas llamadas Ciclo Barroco, que se compone de tres novelas más, Azogue, La Confusión, y El Sistema del Mundo, y que espero poder leer próximamente.
Definitivamente Cryptonomicon te atrapa desde el inicio y poco a poco va introduciendo elementos que harán que no quieras dejar la novela y si eres un geek, la disfrutarás aún más, -garantizado-. Al ser la primera novela que leo de Stephenson, puedo decir que fue la que definitivamente me enroló en las filas del club de fans de Stephenson. Tanto así que ya compré dos novelas más de él: REAMDE y Seveneves.
Finalmente puedo decir que el libro ES una excelente novela geek que aunque es largo, no lo sentirás. El estilo de redacción de Stephenson es bastante ameno y descriptivo y tiene destellos de humor que van muy bien con la trama. Desde el punto de vista de los emprendedores la trama de la novela escenifica una buena muestra de cómo lograr tus objetivos, sin importar lo que pase y se resume en una frase de uno de los personajes principales -Bobby Shaftoe- y que hasta el día de hoy se ha quedado conmigo: “Demuestra un poco de adaptabilidad”.
Si deseas leer Cryptonomicon, aquí está la liga al libro que yo leí 👉 Cryptonomicon en español.
O si lo prefieres, la versión en inglés 👉 Cryptonomicon en inglés.
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